Por qué no debe usarse un documento de identificación para hacer pagos
Han existido varias iniciativas para agregar funciones de pago a las tarjetas de identificación (por ejemplo, los documentos de identificación nacional de Nigeria y las Maldivas), como también programas en los que los gobiernos han intervenido para ofrecer funciones de pago a sus ciudadanos (por ejemplo, una tarjeta de subsidio para el combustible en Egipto y el dinero digital en Ecuador).
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Tres razones por las cuales la combinación de una identificación y la opción de pago no es una solución conveniente
A pesar de que las posibles ventajas de las tarjetas con varios emisores han sido atractivas, la realidad ha demostrado serlo menos. Hay varias razones detrás de todo esto, tres de las cuales enunciamos a continuación:
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La marca de la tarjeta: debe determinarse la marca dominante de la tarjeta
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Atención al cliente poco definida: reemplazar una tarjeta para solucionar un problema de un emisor tiene repercusiones para los otros emisores de la misma tarjeta
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Ciclos de vida diferentes posteriores a la emisión: reemplazar, agregar o actualizar un servicio resulta complejo
Las aplicaciones de billetera móvil, como la solución de identidad móvil goID™ de HID, son mucho mejores que las tarjetas de identificación, pueden emplearse en todas las posibles aplicaciones, con beneficios para las partes interesadas y sin muchos de los aspectos adversos.
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Dos usos prácticos de los pagos con identificación
Los documentos de identificación se emplean en una amplia variedad de aplicaciones; dos de ellas destacan cuando se combinan con los pagos:
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La verificación de edad para la adquisición de bienes restringidos
Para la verificación de la edad, la unificación se considera negativa, ya que viola el derecho a la privacidad. Si el gobierno tiene acceso a información sobre compras de bienes restringidos (alcohol, cigarrillos, videos para adultos, etc.) o acceso a sitios restringidos (clubes nocturnos, bares, etc.) por parte de una persona, esta información puede usarse para perfilar a los ciudadanos. Incluso es posible que las compras con descuentos para ciertas edades deriven en problemas de privacidad, ya que el comprobante de la transacción puede revelar información que podría usarse para construir el perfil social de un individuo, como un destino o un evento social específico al cual haya asistido. -
La distribución de la asistencia social: es posible que un ciudadano necesite demostrar su identidad para cobrar el dinero
Con respecto a la asistencia social, la unificación le aporta valor al gobierno. En circunstancias normales, el dinero se emite a los ciudadanos en sumas fijas que los ciudadanos mantienen en sus propias cuentas hasta que las gasten. En el modelo unificado, el dinero permanece en el bolsillo del gobierno hasta que los ciudadanos lo gasten, lo que significa que el gobierno retiene el dinero por más tiempo y, por lo tanto, puede acumular más intereses. También hay un beneficio de inclusión para ciudadanos no bancarizados, los cuales obtienen acceso a servicios de asistencia social, subsidios y demás.
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Las soluciones de pago gubernamentales no se aceptan a pesar de los beneficios
Los gobiernos que han intentado implementar este modelo con sus poblaciones (por ejemplo, el dinero digital en Ecuador) han notado una adopción muy reducida no solo debido a preocupaciones sobre la privacidad (es decir, que los gobiernos se conviertan en el Gran Hermano), sino también porque las familias podrían querer compartir sus fondos en cuentas separadas o, simplemente, porque los beneficios propuestos para el ciudadano nunca se llegan a materializar.
Una sociedad sin efectivo resulta fundamental para que los gobiernos ahorren costos, reduzcan el fraude y, en consecuencia, reciban más dinero de impuestos y promuevan la inclusión. Sin embargo, combinar los sistemas de identificación gubernamentales con las tarjetas de pago no demostró ser el camino indicado, ya que es un modelo que la población mira con recelo. Los gobiernos deben encontrar otras maneras de promover la inclusión, proteger las identificaciones y la privacidad y, a la vez, distribuir de forma eficaz la asistencia social allí donde sea necesario.
Lea más sobre cómo HID Global puede asistirlo en su próximo proyecto de solución de tarjetas de identificación.
Como gerente de comercialización de productos sénior, Fabrice es responsable de todos los temas de digitalización de las identificaciones ciudadanas y de la seguridad de las identificaciones móviles. Cuando no está asesorando a los clientes sobre cómo implementar sus programas de identificación digital, contribuye de manera regular al desarrollo de estándares internacionales en varios grupos de trabajo dedicados a la identificación y a la seguridad móvil, tales como la norma ISO.